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Cooperación Cultural Internacional desde Australia

© Çristina Aranzubia

La arquitectura representa y formula unos valores culturales inequívocos en cada país; tanto a través del medio ambiente construido, la imagen de ciudad y urbana que se genera, como a través del mensaje de la proyección de futuro y del imaginario colectivo tanto de valores pasados y establecidos, como de futuros precedentes a implementar. La proyección internacional de estos valores es percibida de una manera u otra en conjunto con el branding o marca cultural que cada región lleva asociada a nivel mundial.

A finales del siglo XIX se empezaron a establecer organizaciones culturales pertenecientes a cada país cuyos propósitos, alineados con políticas nacionalistas, pretendían difundir la lengua y la cultura originarias en diferentes ámbitos sociales. Especialmente después de la posguerra, se utilizaron herramientas de articulación de las artes y el patrimonio para reforzar los lazos entre países y como instrumento de recuperación moral.

Australia ha establecido y continúa estableciendo unas relaciones importantes con diversos países de Asia, definiendo una estrategia geopolítica que engloba la zona del Asia-Pacífico e Indo-Pacífico. Además de sus relaciones culturales con países árabes, latino americanos y europeos.

Sin embargo, desde el punto de la cultura y la arquitectura especialmente, los modelos a seguir vienen más influenciados por los países europeos y por los modelos anglosajones y estadounidenses. Estos últimos han influenciado los modelos de negocio de las oficinas de arquitectura, sus sistemas y sus metodologías de trabajo, mientras que los estudios europeos son el punto de mira desde la arquitectura contextualizada, responsable socialmente y con aspiraciones de investigación tecnológica y de sofisticación en el detalle.

La imagen de la arquitectura australiana que se percibe desde el exterior, tiene mucho que ver con la proyección del branding cultural del país. Mientras que Turismo Australia difunde valores de calidad de vida, medioambiente, naturaleza y producción agrícola; Nation Branding quiere también reforzar lo relativo a los logros culturales y científicos de la nación. Éstos se traducen a través de la arquitectura en una tal vez minoría de estudios de tamaño pequeño y mediano, cuyos valores de empresa y proyectuales se alejan de las imágenes corporativas de las grandes oficinas.

En Australia se entienden tres conceptos asociados a los acercamientos culturales:

La diplomacia cultural, que tradicionalmente la asociamos con el papel de los diplomáticos y sus actividades asociadas a nivel político-cultural; pero que hoy en día esa definición se extiende a organizaciones que pueden no tener relación estatal o institucional;

las relaciones culturales, por medio de lazos recíprocos entre diferentes culturas, cooperación y beneficio mutuo a través de residencias, programas de movilidad y eventos conjuntos;y la acción cultural internacional, que se acerca más a aquellos valores que el gobierno quiere transmitir de cara al exterior, actividades instrumentales que se ponen en relación con los objetivos nacionales estratégicos.

Las iniciativas culturales que tienen lugar en relación a las estructuras de gobierno son las siguientes: Department of Foreign Affairs and Trade (DFAT), Otras organizaciones y programas ligadas al gobierno como el Australia Council for the Arts, Turismo Australia o Austrade y finalmente organizaciones independientes como museos, teatros, festivales, bibliotecas.

Department of Foreign Affairs and Trade (DFAT)

Dentro del sistema estatal conocido como el Departamento de Relaciones Externas y Comercio, existen ciertos programas para las relaciones con el exterior como Fundaciones, Councils e Institutos. Los objetivos del DFAT se centran en los siguientes puntos:

 

            - Promover los valores australianos de medio ambiente, economía, comercio, educación,           ciencia, tecnología e innovación.

            - Integración con la región Indo-Pacífica.

            - Reforzar la influencia australiana en el panorama político internacional de seguridad.

            - Promover Australia como un lugar atractivo donde estudiar, visitar, vivir e invertir.

Las fundaciones, councils e instituciones (FCI), enumeradas a continuación, ponen de manifiesto la relación creciente que se establece mayoritariamente con los países del Indo-Asia Pacífico.

 

           Australia-China Council (ACC)

            Australia-India Council (AIC)

            Australia-Indonesia Institute (AII)

            Australia International Cultural Council (AICC)

            Australia-Japan Foundation (AJF)

            Australia-Korea Foundation (AKF)

            Australia-Malaysia Institute (AMI)

            Australia-Thailand Institute (ATI) 19

            Council for Australian-Arab Relations (CAAR)

            Council on Australia Latin America Relations (COALAR)

            Australia-France Foundation (AFF)

Para fomentar el desarrollo e intercambio internacional de las diferentes empresas australianas, existe un sistema de becas de AICC y FCI destinadas a contribuciones culturales. Dentro de las varias categorías está la de arte, que a su vez engloba las siguientes sub-categorías: Música, Visual, Teatro, Literatura, Danza, Diseño (dentro de la cual se encuentra arquitectura), y otras artes.

Como ejemplo del aprovechamiento de estas becas, recientemente la University of Technology of Sydney (UTS) ha sido concedida una beca para participar en la exhibición de arquitectura en la Biennale de Arquitectura y Urbanismo en Seoul, Korea, con el trabajo de los estudiantes de arquitectura y urbanismo del curso de Master.

Además de los intercambios culturales contemporáneos, la identidad australiana y la historia no se deben entender sin el reconocimiento y la aportación de los indígenas que han vivido en Australia desde hace cincuenta a sesenta mil años, antes del asentamiento británico hace más de dos cientos años. El programa focalizado en promulgar el arte aborigen, dentro de DFAT, es el Aboriginal and Torres Strait Islander (ATSI). Muchos artistas aborígenes desarrollan su trabajo en un marco histórico y político que despierta conciencia de las dificultades de tipo social, económico y de salud que han vivido y siguen viviendo los indígenas en este país.

Otras organizaciones y programas ligados al gobierno como el Australia Council for the Arts, Turismo Australia o Austrade 

Fuera de las instituciones del gobierno, pero con objetivos comunes, Austrade proporciona apoyo a inversores, exportadores y negocios que quieran desarrollarse en el mercado internacional, incluyendo las industrias culturales. Su principal aportación es la de elaborar informes, uno de los cuales en relación a la arquitectura es ‘Precintos Culturales’ donde se localizan las destrezas de las industrias creativas australianas para aprovechar oportunidades presentadas por centros de actividades culturales significantes como el West Kowloon Cultural Precinct en Hong Kong, u otros como en Korea del Sur y China. Éstos están acompañados por programas de apoyo para ayudar a las empresas australianas a ganar contratos y se ponen de manifiesto en grandes estudios de arquitectura que ya tienen sede en estos países asiáticos como Hassel, BVN o WoodsBagot.

De diferente manera, pero con un foco similar, Australia Council for the Arts lleva a artistas y su trabajo a un panorama nacional e internacional; entre sus objetivos está el incrementar la colaboración artística con otros países que conlleva la creación de nuevo trabajo y el establecer relaciones a largo término a través de residencias artísticas y un programa extensivo de becas.

Otras agencias artísticas del gobierno que son manejadas dentro de cada Estado son Arts NSW, Arts NT, Arts Queensland, Arts South Australia, Arts Tasmania, Arts Victoria and the Department of Culture and Arts, Western Australia.

 

Dentro del ámbito de organizaciones y programas ligados a las estructuras de gobierno, y en la disciplina de la arquitectura, se encuentran diversas iniciativas como las siguientes enumeradas:

El Programa Droga de Residencia organizado por Australian Institute of Architects (AIA), permite que un arquitecto no australiano establezca relaciones e intercambie conocimientos con instituciones y miembros de la profesión.

 

Por otra parte, el programa de arte público dentro de los ayuntamientos frecuentemente comisiona a artistas internacionales. De la misma manera que la implementación de concursos de arquitectura de ‘Design Excellence’ muy a menudo atrae a figuras reconocidas a nivel mundial. No sólo está en el interés de las instituciones públicas traer una imagen de marca internacional, sino que también los promotores se benefician del prestigio en las ventas a pequeños inversores extranjeros.

 

Numerosas instituciones como las universidades, la unión internacional de arquitectos, el AIA o los Councils como el de Tall Buildings and Urban Habitat (CTBUH), llevan a cabo conferencias y simposios en los que arquitectos internacionales son invitados a difundir su conocimiento.

 

Probablemente la participación internacional australiana a nivel arquitectónico y artístico más significante se lleva a cabo en el pabellón australiano para la biennale internacional de arquitectura por un lado y la de arte por otro, en Venecia.

 

Organizaciones independientes como museos, teatros, festivales, bibliotecas

La artista Americana Joan Channick, en su artículo ‘The artist as cultural diplomat’ sostiene que lo que motiva a los artistas que llevan a cabo intercambios y colaboraciones internacionales, no es tanto el interés por difundir sus propios valores; sino entender tradiciones culturales diferentes, encontrar nuevos recursos que sirvan de inspiración, descubrir nuevas metodologías de trabajo e intercambiar ideas de otros cuyos puntos de vista difieren del propio. Tratando de ser influenciados, en vez de influenciar.

En la cultura anglosajona, estadounidenses y la australiana, que como ya hemos dicho está influenciada por estos modelos de negocios, incluso a nivel cultural; el riesgo que conlleva llevar a cabo ciertas iniciativas, balanceado con el beneficio que aportan, especialmente a nivel económico es un factor muy tenido en cuenta. A pesar de que es difícil cuantificar el beneficio monetario que estas relaciones culturales ofrecen; sí que se pueden calcular en términos de aumento de las capacidades, conocimiento, destrezas y confianza.

Para concluir, el mayor riesgo seguramente lo toman aquellas instituciones independientes, que en si mismas tienen desarrolladas unas ciertas capacidades como el acceso a suficientes recursos incluyendo los modelos flexibles de financiamiento, la investigación en el extranjero para desarrollar relaciones, así como el entendimiento de logísticas y audiencias locales. 

Por nombrar algunas iniciativas en el ámbito de la arquitectura, se están estableciendo contribuciones internacionales a través de programas de charlas como el BrickWorks Talks o la comisión de pabellones y/o instalaciones arquitectónicas como la del Sherman Contemporary Art Foundation. Finalmente, cabe destacar el programa desarrollado el pasado junio titulado 40 Days of Spanish Architecture in Australia, en el que se trajo la exhibición del pabellón español en la bienal de Venecia, además de traer a Iñaki Carnicero, Carlos Quintáns y Francisco Mangado como ponentes internacionales principales.

 

Cristina Aranzubia y Víctor Olivar, arquitectos. Corresponsales del COAC en Sídney, Australia

 

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