El Colegio de Arquitectos de Cataluña ha concedido las Medallas COAC 2025 a cinco figuras y colectivos que han destacado por su aportación transformadora al mundo de la arquitectura: las arquitectas Anna Pont (a título póstumo), Anna Bofill y Joan Tous Gomà-Camps, la cooperativa Societat Orgànica y el ceramista Toni Cumella.Las Medallas COAC constituyen la condecoración institucional del Colegio de Arquitectos de Cataluña para
reconocer la contribución de personas o instituciones al progreso de la arquitectura o del propio Colegio. Los reconocimientos se entregaron en el marco del
Acto Institucional del COAC el pasado 2 de julio, en el que también se homenajeó a los arquitectos que han cumplido 50 años de colegiación y se distinguieron las donaciones de fondos profesionales al Archivo Histórico y la Biblioteca
En este contexto, el COAC ha otorgado la Medalla a título póstumo a
Anna Pont por una trayectoria marcada por la sensibilidad, el compromiso social y ambiental, y una mirada artística que trasciende la técnica. Junto a Jordi Comas, desde el Estudio Comas‑Pont, impulsó proyectos educativos, sanitarios y de transformación urbana con una clara vocación de servicio público. Su obra, reconocida con galardones como el Premio FAD 2025 por la a
Plaza Riells , destaca por su excelencia profesional y por su capacidad de emocionar a través de la arquitectura.
El reconocimiento a
Societat Orgànica pone en valor su contribución a la integración de criterios ambientales, sociales y energéticos en el diseño arquitectónico. Con una trayectoria consolidada en asesoramiento, investigación y divulgación, han sido clave en la transformación ecológica del sector, promoviendo una arquitectura más justa, eficiente y comprometida con el planeta.
También ha sido distinguido
Toni Cumella, ceramista que ha sabido llevar la cerámica más allá de la artesanía, integrándola como elemento estructural y expresivo en proyectos arquitectónicos de gran relevancia. Desde su taller Ceràmiques Cumella, ha colaborado con arquitectos y artistas en obras emblemáticas, combinando tradición e innovación con gran sensibilidad y belleza.
Con esta condecoración, el COAC pone en valor la trayectoria pionera de
Anna Bofill, una de las primeras mujeres arquitectas tituladas en Cataluña, que ha integrado la perspectiva de género, la investigación formal y la interdisciplinariedad en su práctica. Su obra, marcada por la exploración geométrica y una mirada crítica sobre el espacio y la sociedad, ha sido clave para la renovación del pensamiento arquitectónico contemporáneo.
Finalmente,
Joan Tous Gomà-Camps ha sido reconocido por su dedicación incansable al Colegio de Arquitectos y por haber sido una figura clave en la preservación del legado de Josep Maria Jujol. Presidente de la Demarcación de Tarragona entre 2014 y 2022, y actual jefe de Representantes del Grupo, ha sido uno de los principales impulsores para que el COAC se convirtiera en depositario del archivo Jujol, con más de 22.000 entradas inventariadas. Su labor, desinteresada y comprometida, ha sido fundamental para garantizar la conservación y difusión de uno de los fondos documentales más relevantes de la arquitectura catalana.
Con estas distinciones, el COAC reafirma su compromiso con una arquitectura innovadora, crítica y comprometida con la sociedad y el planeta.