Centro de Interpretación Punta Tombo - 8a Biennal 2014

Jose Pablo Mehaudy

Ante la realidad existente del exceso de visitantes al Área Natural Protegida Punta Tombo en Provincia del Chubut Republica Argentina, el Gobierno de la Provincia de Chubut contrata los servicios del estudio para desarrollar el proyecto del Centro de Interpretación del Área Natural Protegida.
Cabe destacarse que Punta Tombo es la Reserva natural de Pingüinos magallánicos más grande del Mundo y es visitada por más de 300 000 turistas en la temporada que se desarrolla entre los meses de septiembre a abril de cada año.
Con el objetivo de recibir a estos Turistas tanto locales, regionales, como nacionales e internacionales se construye esta gran Obra.
Dentro de esta recepción del turista, el edificio propone un recorrido interpretativo a la manera que los pingüinos recorren su hábitat. O sea subiendo y bajando, entrando a salas oscuras a manera de cuevas y saliendo a espacios asoleados generando en el visitante una sensibilidad muy especial sugerida por formas, colores, texturas y sonidos.
La Obra en si se fusiona integrándose tanto volumétricamente como en su piel y texturas
El Proyecto se comienza con el armando de una gran maqueta de barro de 2 m x 2m, donde con la plan altimetría, se realizo una replica de la lomada donde debería encastrase este edificio.
El resultado del edificio como un conjunto de volúmenes resulta ser el calado en la lomada que se eleva a menos de un kilómetro de la costa y de la pingüinera, y termina reconstruyendo la lomada tanto su pendiente como los usos en las distintas curvas de niveles.

La característica principal del Centro de Interpretación es que se apoya y recorre todo sobre una misma curva de nivel, es decir en un perímetro de la elevación de altura uniforme, su disposición circular se mimetiza con la curva de su ladera, y la pendiente del terreno se experimenta también en el interior, con rampas que salvan las diferencias de nivel.

El concepto integral del Centro de Interpretación parte de dos ideas básicas: “Vivir la naturaleza desde sus mismas entrañas y transmitir la experiencia de la vida del pingüino, que viene a la tierra firme desde el mar”. Para eso, se concibió un programa de contenidos que abarcan tanto la geografía y la historia de Punta Tombo como el mundo marino: los dos hábitats naturales de estas aves. “Ante todo, los pingüinos vivían en un lugar donde había vida, donde hubo aborígenes y donde hay geografía”.
El primer espacio sitúa a los visitantes en la (pre) historia de la formación de Tombo a lo largo de las distintas eras geológicas. Después se accede al espacio del Pingüino Magallánico, dedicado a la vida de estas aves, y desde allí, por la rampa interior que desciende la pendiente de la lomada, al amplio Espacio del Mar y la Tierra. “Allí se cuenta lo que los visitantes no pueden ver en la pingüinera, lo que pasa bajo el mar”. Para esto se diseñó una escenografía interior que recrea el hábitat natural con sus grutas y formaciones rocosas, y proyecciones submarinas en tiempo real.

“El interior nos introduce en un mundo ilusorio: el mundo de las profundidades del mar y de la naturaleza. Los bordes caprichosos de su geografía aparecen sugeridos por las formas de restingas y acantilados audazmente iluminados, y la topografía continúa presente también en los varios niveles unidos por rampas de un recorrido laberíntico”. El diseño interior y sus componentes tallados aluden a la fauna marina “pero sin recurrir a la obvia taxidermia, sino más bien a la estatización de las especies”.
Estos espacios están iluminados muy sutilmente por la luz solar filtrada por claraboyas en el techo, ojos de buey y ventanas bajas, con el agregado de algunos leds alimentados por energía solar.

Desde el edificio, un largo sendero socavado (“para experimentar el silbido del viento patagónico sobre la cabeza”) conduce al Domo de los Vientos, un mirador, desde donde se puede disfrutar del paisaje a 360°. Al otro lado del Patio del Aljibe se ubicó la cafetería, y más abajo en la ladera, las áreas restringidas: biblioteca, áreas de estudio, laboratorios y servicios.
Una vez que nos retiramos del edificio ya estamos en condiciones de sentir caminar y observar mas a la manera de lo que lo hacen los Pingüinos Magallánicos.
El proyecto cuenta con áreas totalmente diferenciadas
El Estacionamiento y senderos de acceso están construidos 0.50m socavados en la tierra logrando que quien lo camina se disperse en el paisaje .No solo la Arquitectura sino también el impacto de los visitantes en el paisaje se mitigue en su recorrido.
La muestra Interior fue concebida dentro de los parámetros de la Arquitectura sustentable basándose claramente en una muestra donde lo Artístico supero a lo Grafico. Se cuido delicadamente que los colores utilizados en la elaboración de Textos de interpretación estuviese dentro de estos tonos y no se utilizaron colores ni lenguajes ajenos a la cultura y paisaje imperante.
La iluminación de la muestra interior se realiza por huecos en los techos a manera de luz cenital pensando en que es un edificio que se recorre solo de día.
La estabilidad en la temperatura interior del edificio se ha logrado mediante la aislación muraría y el poco aventanamiento en parámetros verticales como así también el socavado de la meseta para lograr que el edificio este al reparo de los vientos predominantes del Oeste de 180km por hora en épocas estivales.
Se priorizaron los recorridos evaluados en su tiempo de recorrido y etapas por grupos de un Colectivo de visitantes o sea 48 personas al mismo tiempo accediendo a cada sala, tanto como a sanitarios y confiterías este recorrido se dio a lo largo de todo el edificio tardando en recorrerse 1.45 minutos disfrutando de cada espacio y estadía en la confitería.

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