Propers Actes
Presentación de la nueva Herramienta para el cálculo de...
Presentación de la nueva...
Arquitectura sostenible en Argentina
La responsabilidad que asumimos los arquitectos para atender los requerimientos de las personas y el cuidado del medio ambiente y su sostenibilidad es un tema fundamental en la etapa de diseño.
Arquitectos comprometidos con el tema priorizan en sus diseños la calidad de vida de sus usuarios y tienen conciencia del impacto ambiental que causa la arquitectura en relación con el cambio climático y sus consecuencias en el medio ambiente.
A partir de la década de 1970 los científicos advirtieron que muchas de estas acciones producían un impacto sobre la naturaleza, con evidente pérdida de la biodiversidad, y elaboraron teorías para explicar la vulnerabilidad de los sistemas naturales.
En este marco por iniciativa de las Naciones Unidas se desarrollaron sucesivas Cumbres, llamadas Conferencias de la ONU sobre el Medio Ambiente, con el objeto de delinear políticas internacionales para poner freno al deterioro ambiental. Estas cumbres se conocen como Cumbres de la Tierra.
La primera tuvo lugar en Estocolmo en 1972. Allí se establecieron las bases de las primeras políticas medioambientales y la conciencia de que los recursos naturales deben ser preservados.
La utilización del término 'sostenible' comienza a partir del informe de la ONU elaborado en 1987 por diversas naciones reunidas en comisión, encabezadas por la doctora Gro Harlem Brundtland, en ese momento primera ministra de Noruega. Originalmente se denominó "Our Common Future", (“Nuestro futuro común"). En este informe se utilizó por primera vez el término 'Desarrollo Sostenible': "El desarrollo es sostenible cuando satisface las necesidades de la presente generación sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para que satisfagan sus propias exigencias"
Este informe basa el desarrollo sostenible en tres factores: sociedad, economía y medio ambiente, y remarca que el empobrecimiento de la población mundial es una de las principales causas del deterioro ambiental a nivel global.
En 1992 los jefes de estado reunidos en la "Cumbre de la Tierra" en Río de Janeiro se comprometieron a buscar juntos un programa de acción para el siglo XXI (Programa 21), ratificaron el Convenio sobre la Diversidad Biológica y acordar la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). Los resultados fueron las sucesivas Conferencias de Partes (COP) y el Protocolo de Kyoto sobre el cambio climático, acuerdo internacional firmado en 1997 con el objetivo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y que entró en vigor en 2005.
En las siguientes cumbres de Johannesburgo en 2002 y nuevamente Río de Janeiro en 2012 se produjeron avances en la formalización de acuerdos con el fin de detener el deterioro ambiental y el consecuente cambio climático, aunque los progresos no fueron paralelos con la gravedad del problema ante la poca contribución de algunos de los países más contaminantes. En 2015 se realizó la cumbre en París, donde se estableció un acuerdo que sustituyó el Protocolo de Kyoto llamado Acuerdo de París. En 2017 se hizo en Bonn la 23ª Conferencia de la ONU (COP23) que concluyó con la aprobación de un documento en el que empiezan a concretarse las reglas del Acuerdo de París contra el cambio climático. Cerca de 200 países reafirmaron su compromiso, a pesar de la salida de Estados Unidos.
Hacia una arquitectura sostenible
En la primera cumbre de Río de Janeiro, en 1992, también se realizó una reunión convocada por investigadores, académicos y ONG mundiales para debatir cuál era el estado del conocimiento ambiental en las diferentes disciplinas. Hubo cientos de trabajos de todo el mundo entre los que se encontraban los de arquitectos provenientes de corrientes previas como la arquitectura bio-climática, la solar, la verde, etc.
Es en 1998 cuando se publicó el documento An Introduction to Sustainable Architecture donde se sintetizan los principios de la Arquitectura Sostenible.[1]
En 2004 en Argentina el Diccionario de arquitectura precisa las palabras bio-climática, bio-ambiental, solar pasiva, sostenible, ambientalmente consciente, para unificar una línea de pensamiento y define: "... estos adjetivos se integran en construcciones que designan las estrategias y los edificios que son concebidos, se construyen y funcionan de acuerdo con los condicionantes y posibilidades ambientales del lugar (clima, valores ecológicos), sus habitantes y estilos de vida "
El tema continuaba impreciso, y en 2005 se realizó el Primer Seminario Internacional de Arquitectura Sostenible y Bioclimática con el fin de reunir a especialistas iberoamericanos a dirimir el enfoque de cada sub-corriente y encontrar acuerdos, en la ciudad de Montería, Colombia.
El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), el principal organismo dedicado a la promoción de la ciencia y la tecnología en Argentina creó en 2013 el área de Hábitat, Ciencias Ambientales y Sostenibilidad, para que de manera progresiva se trabajara en temas ambientales. En esta área se encuadran líneas de investigación tales como: el diseño de nuevos materiales, planeamiento urbano, diseño de viviendas, hábitat y energía, arquitectura bioclimática y sostenible, historia de la arquitectura y diseño ambientalmente consciente.
En 2015 se integra a investigadores de diferentes disciplinas, biólogos, físicos en energías renovables, ingenieros, sociólogos, antropólogos, agrónomos, químicos, historiadores y arquitectos para interactuar y conseguir la primera comisión transversal con base en la sostenibilidad.
Esto muestra la consolidación institucional que va alcanzando esta corriente de pensamiento en la arquitectura, junto al compromiso de los arquitectos en tomar conciencia del impacto ambiental que causa el ejercicio profesional en relación con el cambio climático.
La arquitectura genera un impacto social en la población y son necesarios buenos ejemplos en cada comunidad para mostrar las guías a seguir.
Después de tres décadas de presentar el informe Brundtland no se encuentra una concepción global clara y precisa de la arquitectura sostenible. Es un concepto que todavía tiene los problemas de la visión personal, subjetiva y poco científica, y cada arquitecto lo define de una manera diferente.
A esto se le suman intereses económicos creados alrededor de la arquitectura que están desvirtuando el verdadero concepto de sostenible. Una construcción con certificación de eficiencia energética y aparentemente con materiales y con tecnologías ecológicas, en la práctica no necesariamente es sostenible. La arquitectura verdaderamente sostenible debe conseguir sus fines fundamentalmente con un diseño eficiente, buscando optimizar los recursos naturales y los sistemas de edificación de tal modo que minimicen el impacto ambiental sobre el medio ambiente y sus habitantes.
"La arquitectura sostenible implica un compromiso honesto con el desarrollo humano y la estabilidad social, utilizando estrategias arquitectónicas para optimizar los recursos y materiales; disminuir al máximo el consumo energético, promover la energía renovable, reducir al máximo los residuos y las emisiones, reducir el mantenimiento, (...) y mejorar la calidad de la vida de sus ocupantes ".
(Luís de Garrido)[2]
Actualmente se puede determinar como de sostenible es un proyecto, hay conocimientos científicos y técnicos para construir hábitats sostenibles y autosuficientes. Hay contados arquitectos a nivel internacional que han asumido el reto profesional de crear una eficiente arquitectura sostenible a través de un diseño racional, para ello hay que formarse en diversas disciplinas ecológicas.
Un ejemplo de arquitectura sostenible: Eco-barrio Villa Sol
En Salsipuedes, Córdoba (Argentina), un grupo de arquitectos proyectó y comenzó a construir el primer barrio ecológico de la provincia [3]
El proyecto fue coordinado por las arquitectas Isabel Donato y Marta Sosa, que pusieron en práctica las experiencias aprendidas en la Expo 2000 de Hannover [4], en la planificación del Eco barrio.
En 2005 comenzó la primera etapa del proyecto, que consta de siete hectáreas de las cuales el 50% son destinadas para esparcimiento y micro iniciativas, como por ejemplo un huerto orgánico.
El proceso busca adaptarse al terreno y construir con los materiales propios de la zona como piedra, tierra y arena. A diferencia de las viviendas tradicionales que se construyen sobre la base de un cuadrado, estas se realizan en base a un octógono para aprovechar la luz solar y con techos en forma de cúpula de madera y caña. Estos diseños fueron incorporados al código de edificación de la ciudad de Córdoba.
Esta urbanización ecológica es un proyecto con sentido social, que cuenta con energías alternativas, bio-construcción, plantas fito-depuradoras y huertas orgánicas.
Además, es una comunidad de barrio que provee alimentos, trabajo, cuidado para los niños y ancianos, y el apoyo de un grupo humano solidario. Cabe destacar de este proyecto la investigación y experimentación de principios sostenibles.
Conclusión:
A nivel global la planificación de la arquitectura está inmersa en una inercia reticente a los cambios y le corresponde encontrar respuestas realistas y efectivas de acuerdo con el presente. Esto se debe conseguir a través del uso racional de los medios de que disponemos hoy para generar unas condiciones de vida dignas, a las que todas las personas deben tener acceso sin que ello implique la destrucción irremediable del medio ambiente. Se puede confirmar que la Arquitectura Sostenible es verdaderamente una Arquitectura Eficiente.
Bibiana Sciortino, arquitecta. Corresponsal de Córdoba, Argentina
[1] Escuela de Arquitectura y Planeamiento Urbano, Universidad de Michigan, 1998, EUA.
[2] Exposición Mundial de Arquitectura Sostenible, 2010, Fundación Canal, Madrid
[3] Un estilo de vida diferente, LA NACION, Argentina 11/02/ 2006
[4] Exposición Universal, Hombre, naturaleza y tecnología, orígen de un nuevo mundon, Hannover 2000, Alemania